El hombre sentado en un banco by Horace Pippin - 1946 Museo de Arte de Filadelfia El hombre sentado en un banco by Horace Pippin - 1946 Museo de Arte de Filadelfia

El hombre sentado en un banco

óleo sobre lienzo •
  • Horace Pippin - 22 de febrero de 1888 - 6 de julio de 1946 Horace Pippin 1946

Mirar atrás, al otoño de la propia vida, es uno de los temas de esta pintura (supuestamente) autobiográfica del artista afroamericano Horace Pippin. Aunque transmite paz y contemplación “El hombre sentado en un banco” es una obra teñida de tristeza. Fue pintada el año en el que Pippin murió, con 58 años. Pippin fue un artista autodidacta de Pennsylvania (EEUU) que empezó a pintar como terapia tras la Primera Guerra Mundial. Este artista fue un miembro del 369º Regimiento de Infantería, la primera división afroamericana desplegada en Europa. Sus integrantes eran conocidos como los Harlem Hell Fighters ya que fueron expuestos a condiciones extremas. Durante sus años de servicio, Pippin llevaba consigo un diario ilustrado con dibujos a lápiz. Años después, él mismo confesó que la guerra “sacó todo el arte que había en él”. Un mes antes del armisticio un francotirador alemán destrozó el hombro derecho y lo dejó permanentemente discapacitado. Once años después, Pippin empezó a pintar como terapia física y también emocional, una escena de la guerra, usando su mano izquierda para mover su mano derecha con la que sostenía el pincel. El proceso era doloroso y tedioso, pero, aun así, Pippin realizó varias pinturas sombrías rescatando algunas pinturas y pinceles. A los 49 años, después de 8 años en los que no tuvo ningún reconocimiento, el trabajo de Pippin fue descubierto por un artista local, el conocido ilustrador N.C. Wyeth, en una exposición de arte de la ciudad. No mucho tiempo después sus obras fueron incluidas en una exposición itinerante, gracias a la cual obtuvo un gran reconocimiento. Fascinaba al público con su representación de la vida afroamericana y coleccionistas adinerados, celebridades de Hollywood y museos compraron sus obras.

Pippin no era un artista de formación, y aunque sus imágenes eran planas y simples, sus obras tienen una gran intensidad emocional por su franqueza. “Cuando estoy delante una obra pongo en ella todo lo que tengo que ofrecer”, decía el artista. Los sujetos de sus pinturas reflejan sucesos que tuvieron algún impacto en su vida: la guerra, la familia, la comunidad y la religión. También realizó varios cuadros históricos, donde encontramos tres cuadros del famoso abolicionista John Brown. Lamentablemente, el ascenso a la fama afectó la vida de Pippin. Se sentía presionado para producir más y mejores cuadros, lo que le llevó a la bebida. Además su esposa sufría problemas físicos y mentales, cosa que agravó la situación de su matrimonio. Aunque el legado de Pippin llega casi a 140 cuadros y dibujos, “El hombre sentado en un banco” es un conmovedor retrato de un hombre sin pretensiones, cuyo arte venía del corazón.

Martina