Gustav Mauritz Armfelt fue uno de los favoritos del rey Gustav III de Suecia. Tal vez hoy nos resulte difícil asociar su retrato tan andrógino al poder e influencia social, pero para sus contemporáneos este fue su aspecto real. Los rasgos del poder cambian a lo largo de la historia y esto, inevitablemente, queda asociado a las nociones de género.
Una vez más presentamos una obra relacionada con el #Mes del Orgullo Gay y, en esta oportunidad, por gentileza del Nationalmuseum en Estocolmo.
¿Estás interesado en conocer cómo la homosexualidad y el homoerotismo han coloreado el arte y a los artistas a lo largo de la Historia? Para más info ve a este enlace: Queer: Deseo, Poder e Identidad.