Tres bellezas del presente día

Las tres famosas mujeres Edo (Tokio) representadas en este grabado en madera, todas famosas por su sorprendente belleza, pueden identificarse por las crestas en su kimono o por el abanico que una de ellas sostiene en su mano. Naniwaya Okita, la joven mujer a la derecha, era camarera en la casa de té Naniwaya y puede identificarse con ese establecimiento por la cresta floreciente del árbol paulownia (kiri) en su abanico. A su lado, a la izquierda, está Takashima Ohisa, la hija de un dueño de una tienda de pasteles de arroz, que tiene una cresta de triple hoja de roble (mitsu-gashiwa) en su kimono. En la parte superior central está la artista profesional (geisha) Tomimoto Toyohina, con una cresta de flor de primula (sakuraso) en su manga de kimono. Kitagawa Utamaro se destaca por su interés en la fisonomía (fue uno de los artistas de impresión en madera japoneses más famosos y exitosos) y el estudio de los rasgos faciales de un individuo como una indicación de su carácter. Esto lo ayudó a alterar sutilmente las características de cada rostro para crear una sensación de retrato e individualidad, como la posición y el espaciado de los ojos, la forma de la nariz y la colocación de las orejas. Al mismo tiempo, conservó una belleza estilizada e ideal caracterizada por caras alargadas y pequeños ojos y bocas. Tres bellezas demuestra tres nuevos desarrollos en el grabado japonés que Utamaro ayudó a popularizar durante el periodo Edo: el uso de la llamada composición de "cabeza grande" (okubi-e), que proporciona un primer plano de cada tema, la formación piramidal de las figuras y el uso de un fondo chispeante de polvo de mica (kirazuri) que activa los suaves tonos mate de las caras. Esta impresión es una de al menos tres estados (versiones con alguna variación de detalle) conocidos de este diseño e incluye una cartela de título en la esquina superior derecha.