Saturnino Herrán fue un pionero del arte mexicano del siglo XX. Fue contemporáneo del reconocido Diego Rivera y vivió durante el turbulento tiempo de la Revolución mexicana, que comenzó alrededor de 1910.
A diferencia de muchos artistas que lo precedieron, Herrán mostró la cultura tradicional mexicana y la colonial europea fusionadas tal como sucedía en la vida real. Sus trabajos representan nativos mexicanos así como mestizos, hijos de mexicanos y de europeos. Con frecuencia, sus cuadros referencian aspectos de la cultura nativa, de religión y de mitología, generalmente lado a lado con la influencia de su contraparte europea.
Esta pintura es uno de los trabajos más conocidos de Herrán y es muy representativa de su tipo de obra. La pintura representa a una familia mestiza con sus trajes tradicionales viajando en un bote con ramos de cempasúchil, la flor usada en las ceremonias del Día de los Muertos, y parece que las entregan para esta festividad. Esta es la ofrenda a la que se refiere el título.
Herrán ha influenciado a muchas generaciones de artistas mexicanos que trabajaron durante y después de la revolución al retratar, en un momento clave para la historia de la nación, aspectos de la cultura mexicana de principios del siglo XX y que anteriormente habían sido ignorados. Desgraciadamente, su propia carrera fue muy corta: murió a los 31 años y no pudo ser testigo del fin de la revolución.
- Alexandra Kiely