Diego Velázquez
El Retrato del papa Inocencio X es un óleo sobre lienzo del pintor español Diego Velázquez, realizado durante un viaje a Italia alrededor de 1650. Muchos artistas y críticos lo consideran el mejor retrato de la historia. La pintura destaca por su realismo; es un incomparable retrato de un hombre brillante, inteligente, pero que está envejeciendo. Está ataviado con vestidos de lino, y la calidad del trabajo es evidente en los ricos rojos de su vestimenta superior, el tocado y las cortinas. Velázquez incluyó su firma en el papel que el papa está sosteniendo, pero es difícil leer la fecha.
Cuenta la historia que Velázquez ya era un reconocido pintor y que, mientras visitaba la Ciudad del Vaticano, se le concedió una audiencia con el papa Inocencio X. Ofreció hacer un retrato del papa, pero Inocencio X dudó, pues desconfiaba de la fama de Velázquez. Le pidió a Velázquez muestras de sus habilidades y este envió el retrato de su sirviente Juan de Pareja (hoy se muestra en el Museo Metropolitano de Nueva York). Una vez que el papa vio el retrato de Juan de Pareja, le permitió a Velázquez hacer su retrato.
El marchante de arte René Gimpel anotó en su diario en 1923 que “[J. P.] Morgan hubiera ofrecido un millón de dólares por él. Velázquez se enfrentó con un italiano rojizo y el artista, acostumbrado a las pálidas complexiones de sus compatriotas, sin dudarlo empapó su pincel en color rojo vino y avivó el bon vivant… Esa cara es un remolino de carne, sangre y vida; los ojos son buscones”.
- Clinton Pittman
P. D. Aquí puedes leer sobre retratos de la realeza británica.