Frederic Edwin Church
Ávido viajero y explorador-artista, el pintor estadounidense Frederic Church hizo su primer viaje a la costa de Maine en 1850. El atractivo de la impresionante costa y del terreno natural le hizo volver en repetidas ocasiones a la zona durante los siguientes 30 años. En busca de paisajes aún más remotos, en los veranos de 1850 y 1851 navegó hasta la isla de Grand Manan, una isla de Canadá situada a 20 millas de la costa del punto más oriental de Maine.
Espectacularmente iluminada por el sol que se pone y con sombras proyectadas por las nubes en la zona superior del cielo, la pintura finalizada de Church de este lugar salvaje se caracteriza por sus formas ásperas, superficies rotas y contornos irregulares. Un pescador solitario se aparta de la escena, bañándose en el resplandor de la luz del sol que ilumina la espectacular vista que tiene a sus espaldas.
Presentamos esta bella pintura gracias al Museo de Arte Wadsworth Atheneum de Hartford, Connecticut (Estados Unidos).
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