Un Rincón de Apartamento

En 1871 y hasta 1878, Monet regresa de Inglaterra a Argenteuil, un municipio cercano a París. Durante este periodo, representa a menudo en sus cuadros a su esposa Camille, acompañada por su hijo mayor Jean, nacido en 1867. Aquí aparece, probablemente Camille,  con el trasfondo, en la penumbra, en el interior de la segunda casa habitada por Monet en Argenteuil.
El primer plano está constituido por un decorado simétrica: cortinados con motivos de colores, plantas verdes y jarrones de adorno que también se encuentran en otros cuadros de Monet. Esta composición da la impresión de un telón que se abre hacia un escenario. Se guía la mirada del espectador hacia el fondo de la habitación, hasta la zona luminosa de la ventana. En el mismo centro del lienzo, la sucesión de líneas oblicuas intensifica el aspecto simétrico de la vista de conjunto, enfatizando la perspectiva. Desde este punto focal se puede descubrir a Jean, de pie y levemente desplazado hacia la derecha, la lámpara y la mesa en el centro, y a Camille sentada en la izquierda. La silueta del niño, que aparece en contraluz, se refleja en el parquet iluminado por la luz que procede de la ventana. En este interior, "se había estudiado sobre todo la entrada del aire y de la luz", como lo ha evidenciado el escritor crítico de arte Gustave Geffroy en 1894. Esta escena íntima, silenciosa, imagen de la vida familiar cotidiana en Argenteuil, está recreada en un espacio azulado. Esta gama de color sugiere una atmósfera de tranquilidad y poesía que nos evoca el mundo de la infancia del escritor Marcel Proust, tal como él lo describiría luego en En busca del tiempo perdido.