El espíritu de los muertos en vela

Esta pintura fue inspirada en Tehura, la esposa tahitiana de Gauguin, quien en ese momento tenía 14 años. Una noche él llegó a su casa y la encontró acostada en la cama boca abajo, desnuda, con miedo y con los ojos bien abiertos e inmóviles. Mientras lo miraba, era como si estuviera mirando directamente a un fantasma. El mismo Gauguin describió el simbolismo de la pintura, indicando que los colores brillantes eran luces fosforescentes en la oscuridad, ya que los tahitianos temían que las luces brillantes en la oscuridad fueran fantasmas. En su descripción del miedo de su esposa esa noche, afirma que ella lo confundió con un fantasma, pero desde entonces los historiadores han sugerido que su miedo se debía a su comportamiento agresivo hacia ella. Esta pintura también se incluyó en uno de los autorretratos de Gauguin, en el que aparece en el fondo, lo que indica la importancia que tenía para él.