Claude Monet
Los domingos de agosto estarán dedicados a la colección del museo J. Paul Getty en Los Ángeles. Esto quiere decir que durante los próximos cinco domingos presentaremos magníficas obras maestras clásicas de uno de los museos más visitados de los Estados Unidos. ¡Disfrútenlas!
"Todo cambia, incluso la piedra". Claude Monet escribió estas palabras en una carta y las demostró vívidamente en la pintura, transmitiendo una combinación maravillosa de permanencia y mutabilidad a medida que el sol transformaba a diario la fachada de la Catedral de Rouen. Extendiendo la superficie de piedra incrustada del edificio a la superficie de impasto ricamente variada de su pintura, retrató la catedral que resurge perpetuamente a la luz difusa de la mañana. Monet creó varios grupos de pinturas que exploraban el color, la luz y la forma de un único sujeto en diferentes momentos del día, pero su serie de la Catedral de Rouen fue su esfuerzo más intenso en el mismo lugar. Pintó allí a fines de invierno, tanto en 1892 como en 1893 y luego volvió a trabajar de memoria sus treinta lienzos en el estudio hasta 1894. Comenzó esta muestra en 1893, trabajando en un estudio improvisado en la sala de una tienda de modistería frente a la catedral. Después de crear un conjunto coherente, Monet seleccionó veinte pinturas que consideró "completas" y "perfectas", incluyendo esta, para una exposición en la galería de su concesionario de París en mayo de 1895. Pissarro y Cézanne visitaron y elogiaron la serie y los clientes rápidamente compraron ocho pinturas del grupo.