Lei Reina Fantasia by Madge Tennent - 1934 - 244 x 198 cm Isaacs Art Center Lei Reina Fantasia by Madge Tennent - 1934 - 244 x 198 cm Isaacs Art Center

Lei Reina Fantasia

Oleo sobre lienzo • 244 x 198 cm
  • Madge Tennent - Junio 22, 1889 - Febrero 5, 1972 Madge Tennent 1934

Presentamos la pintura de hoy gracias a Isaacs Art Center, ¡gracias! <3

Escribiendo para la revista Paradise of the Pacific en 1944, Madge Tennent invocó esta pintura casi explícitamente para describir a sus queridos sujetos hawaianos: "Incluso el holoku envolvente no puede ocultar las muñecas pequeñas, los delgados dedos y el brazo columnar de la mujer lei más grande. Sus brazos levantados, su sonrisa melancólica, el brillo de brasas de su carne soleada, son una bendición perpetua y reina de parte de una profesión de honor en las islas que poseen a las personas más bellas del mundo." Expresados ​​a través del vibrante prisma del artista, estos rasgos corporales definen a Lei Reina Fantasia, una encarnación imponente (tanto literal como conceptualmente) de la fuerza tácita y la nobleza serena que Tennent intentó capturar durante casi cinco décadas.

Una vez un crítico calificó la obra de Tennent como una expresión de "ritmo en la ronda", una observación afirmada enfáticamente en esta pintura de tamaño mural. Sus pinceladas, colores y formas giran en torno a un homenaje ceremonial al lirismo nostálgico y las proporciones míticas. Siete lei-creadoras curvilíneas orbitan alrededor de la majestuosa figura central, cuidándola mientras tejen plumerias y tuberosas en las fragantes hebras de flores que se han convertido en símbolos mundialmente famosos de Hawai. Su reina del mismo nombre parece surgir de las ondulantes lei que la rodean, como si ella también fuera una flor respladeciente. De alguna manera se ha convertido en la esencia de la lei, una encarnación corpóreo de "aloha".

Esta interacción fluida entre la feminidad y la naturaleza refleja la convicción de Tennent de que las mujeres hawaianas eran la expresión más pura del espíritu de las islas. Percibió en ellas una cierta trascendencia mística que se manifiesta tanto en la composición como en el título de esta obra etérea. Merriam-Webster define la "fantasía" como "una obra en la que la fantasía del autor vuela sin restricciones", y la itinerancia de Tennent había culminado en una orilla de representación de figuras, distante e inexplorada, donde la amplitud y el encanto se unen. Aunque los críticos internacionales pronto recompensarían este viaje, varios lugareños sorprendidos fueron tan lejos como para "profetizar un final estético terrible" para su carrera. Por turnos, desconcertados y divertidos, Tennent más tarde contó alegremente una ocasión en la que un acalorado debate sobre los brazos carnosos de sus damas llevó a una cena de la sociedad a un cierre abrupto.