La “Joya” de Alfred by Artista anónimo  - Late 9th century Museo Ashmolean La “Joya” de Alfred by Artista anónimo  - Late 9th century Museo Ashmolean

La “Joya” de Alfred

Cloisonne de oro, cristal de roca •
  • Artista anónimo Artista anónimo Late 9th century

Alfred es el único rey inglés a quien se le ha concedido oficialmente la distinción de ser llamado “el Grande”, título por cierto muy bien Ganado. Nacido en el oeste de Saxon, de familia real en la Inglaterra del sudoeste promediando el siglo IX, entre los más jóvenes de sus hermanos tenía acaso escasas probabilidades de reinar un día sobre las tierras de Wessex. Al suceder a su hermano mayor, Aetherald, en el año 1871, heredó un reino asediado por los vikingos en ambos frentes. Pese a que no hay evidencias que demuestren su intención de “unir al Reino de Inglaterra” la historia y su desempeño militar así lo han demostrado mientras gradualmente venció a los daneses, por esos días divididos en varios ejércitos. Alfred murió en 1899 y fue su nieto, Athelstan, quien extendió las fronteras del oeste de Saxon y reinó lo que hoy es, mayormente, Inglaterra.

Asser, un monje galés, escribió la biografía de Alfred hacia fines del siglo IX y lo describió como un “cristiano piadoso” con una profunda sed de conocimiento. Tradujo cuatro obras del latín al inglés antiguo, de manera que fueran accesibles a más personas. Algunos estudiosos, incluso, aseguran que puede ser el responsable de las crónicas anglosajonas, un documento fundamental y referencia de la historia de Inglaterra durante siglos. No sorprende que abunden las leyendas e historias acerca de las virtudes de Alfred, una de las que incluye a un Alfred apresurado que, escapando de los vikingos, encuentra refugio en casa de una dama que por recibirlo se distrajo y olvidó sus pasteles en el fuego…

La “Joya” de Alfred recibe este nombre por causa de la inscripción en inglés antiguo que rodea el perímetro del medallón: +AELFRED MEC HEHT GEVVYRCAN (traducido: "fui encomendada por Alfred"). Fue hallada en Somerset, Inglaterra, en el siglo XVII y el propósito de su encargo aún se discute su origen.

En la parte posterior de la joya parece haber señales de que haya tenido un sostén. Los historiadores han sugerido que podría tratarse de la parte superior de un señalador o marca página de un libro. Es posible que la figura bajo el cristal sea una alegoría al sentido de la vista. Aunque la misteriosa “joya”, es un clásico ejemplo de cloisonné inglés trabajado en oro y uno de los pocos objetos que pueden asociarse a este excepcional monarca.

- Stephanie