Henry Ossawa Tanner
Henry Ossawa Tanner favorecía los temas religiosos, en parte debido a las fuertes convicciones espirituales de su familia y los lazos profesionales con la iglesia. La obra que presentamos hoy, Los discípulos ven a Cristo caminando sobre el agua, interpreta el Evangelio de Mateo. En lugar de hacer de Jesús el centro de la composición, Tanner destaca tanto la atmósfera mística como la reacción de asombro de los Apóstoles ante la escena.
El corte de la imagen bajo la línea del horizonte permite que todo el evento ocurra en la extensión monocromática del agua, realzando el tono misterioso de la obra. Curiosamente, Tanner retrata un mar tranquilo, aunque el Evangelio lo describe como "sacudido por las olas", porque prefería las escenas que llevan a la contemplación. En el bote, cada Apóstol posa con expresiva tensión: Pedro, la figura más alta, agacha la cabeza y parece estar extendiendo los brazos en señal de aceptación o quizás agarrando el aparejo por seguridad, otro se arrodilla en oración pero arqueándose hacia atrás con temor, y las figuras en la popa se encogen y se cubren los ojos. Cristo está representado, en la esquina superior izquierda de la pintura, como una fantasmagórica columna de luz cuyo camino está iluminado por el reflejo de la luna en el mar. Junto a esta convincente narrativa, la pintura es uno de los ejemplos más contundentes del magistral uso del color por parte de Tanner. La escena se desarrolla en infinitas variaciones de azul. Las espesas capas de pintura agregan una textura rica a la superficie y agregan aún más profundidad y sombreado al agua, al cielo y a las figuras.
¡Que tengan todos un muy lindo jueves!
P.D. Aquí puedes leer más sobre Henry Ossawa Tanner, un pionero artístico afroamericano. Y aquí un lado original del arte religioso, ¡representaciones controvertidas de los éxtasis de los santos!