Abbott Handerson Thayer
Abbott Thayer fue un artista, naturalista y profesor estadounidense. Como pintor de retratos, figuras, animales y paisajes, gozó de un especial protagonismo durante su vida y sus pinturas están representadas en importantes colecciones de arte estadounidenses.
En un momento concreto de su vida, pintar el paisaje de los alrededores de su casa en Dublín, New Hampshire, le sirvió a Thayer como distracción terapéutica, especialmente cuando se enfrentaba a retos sin resolver en sus obras figurativas. Veneraba profundamente el paisaje de New Hampshire, especialmente el cercano monte Monadnock, que representó en numerosas pinturas. Inspirándose en su filósofo favorito, Ralph Waldo Emerson, Thayer se dedicó al estudio de los paisajes en busca de las verdades morales que pudieran revelar, un razonamiento que también aplicó a sus retratos alegóricos de mujeres.
La pintura que presentamos hoy fue realizada durante el primer año en que la familia de Thayer decidió quedarse en Dublín durante los meses de frío. Thayer sentía predilección por los mantos de nieve inmaculados, ya que la mayoría de sus paisajes de este período son escenas invernales. A través de estas piezas, demostró constantemente cómo el pálido cielo turquesa de invierno proyectaba sombras azules sobre la nieve, un principio fundamental de sus teorías sobre la coloración protectora de los arrendajos azules.
P.D. Si te gustan los paisajes invernales, te va a encantar este Invierno profundo casi abstracto de Cuno Amiet.