Este cuadro es una de las obras más célebres de Vincent van Gogh. En febrero de 1888, Van Gogh se marchó de París a Arles, en el sur de Francia, con la intención de crear una comunidad de artistas. Invitó a Paul Gauguin, a quien admiraba profundamente, a unirse a él como líder de este ideado grupo artístico. Van Gogh pintó Girasoles como parte de los preparativos para decorar la habitación de Gauguin en previsión de su llegada.
La versión de la colección del Museo de Arte Sompo de Tokio fue pintada probablemente entre finales de noviembre y principios de diciembre de 1888, durante el periodo en que Van Gogh y Gauguin vivieron y trabajaron juntos. Se inspiró en el icónico Girasoles de agosto de 1888, actualmente conservado en la National Gallery de Londres. Aunque las versiones de Tokio y Londres comparten una composición y una paleta similares, las pinceladas y las variaciones tonales difieren sutilmente. Estas diferencias sugieren que Van Gogh abordó este cuadro con nuevas intenciones y ajustes creativos, en lugar de aspirar a producir una simple réplica.
Van Gogh estaba realmente obsesionado con los girasoles (en un sentido positivo): les dedicó 11 cuadros, algunos de ellos pintados en París, otros en Arlés. ¡Hemos elegido una de estas obras como portada de nuestro cuaderno dedicado a Vincent van Gogh!
P.D. ¿Sabías que Van Gogh pintó dos series de cuadros de girasoles? ¿Sabes qué simbolizaban? ¡Aquí tienes todo lo que necesitas saber sobre la serie de Girasoles de Van Gogh! Si quieres saber más sobre Van Gogh, consulta los artículos siguientes.