La Abeja del Quilting

Moses era básicamente una pintora de paisajes, pero ciertas memorias y temas requerían un escenario en el interior. Ella sabía esto, y algunos de sus clientes la alentaban a expander su repertorio e incluir interiores. El tema, sin embargo, no se le facilitaba. "Intenté los interiores pero no me gustó, así que lo borré," mencionó en una ocasión. "Eso no parece estar en mi línea. Me gusta pintar algo que me llevé más y más hacia lo desconocido, algo que quiera ver más allá. Bueno, tal vez lo intente de nuevo." Apesar de sus dificultades con el tema, Moses pintó una serie de interiores sorprendentes. Sin el paisaje para anclar la escena y dar el elemento de realismo, sus interiores dependen casi totalmente del dominio de la artista de la forma abstracta y los patrones. Estas cualidades se utilizan al máximo en La Abeja del Quilting, donde los colores y formas del gran Quilt y la elaborada mesa se combinan perfectamente en contraste con las ropas brillantes de los numerosos y activos personajes. Aún así, Moses no pudo resistirse a añadir un poco de naturaleza detrás de las ventanas grandes y sin cortinas.