Leonardo da Vinci
Presentamos este bello Leonardo por petición especial de nuestro usuario Joe. Gracias por la sugerencia. :)
Leonardo no fue un pintor prolífico, pero sí un fecundo dibujante; mantuvo diferentes diarios, llenos de pequeños bocetos y dibujos detallados, donde registró todo tipo de cosas que llamaban su atención. Además de los diarios, se conservan muchos estudios de sus pinturas, algunos de los cuales pueden identificarse como dibujos preparatorios de obras concretas. Este dibujo emplea la sutil técnica de sombreado del sfumato, a la manera de Mona Lisa. Otros dibujos de interés incluyen numerosos estudios, a los que normalmente se conoce como “caricaturas” porque, aunque exagerados, parecen estar basados en la observación de modelos del natural. Vasari afirmaba que cuando Leonardo veía una persona con una cara interesante, la seguía todo el día y la observaba. En esta obra, Leonardo combina un ideal de belleza juvenil con un naturalismo basado en la observación directa y nos hace sentir que no podemos pedir nada más. El rostro, de contornos claros e inclinados hacia la izquierda, es fuerte, está marcado y formado por completo y de forma natural. Los ojos son grandes y están definidos claramente, al igual que la nariz y la barbilla. Pero es de destacar que tendría que girarse para darnos la cara. Además, tanto el cabello y como los hombros están esbozados sumariamente.
¿No parece desvanecerse todo a su alrededor, a pesar de que la propia cara está realzada, y hacerla real de forma más intensa, más inolvidable? Uno puede enamorarte fácilmente de esta mujer, aunque el propio Leonardo fuera más proclive a enamorarse de hombres. Pero esa es otra historia.