Flor de la Muerte

A finales de 1894, el pintor finlandés Akseli Gallen-Kallela fue a Berlín para aprender los conceptos básicos del grabado, el cual se posiciona como una nueva moda debido a la popularidad de los grabados en madera japoneses y al decorativo estilo Art Nouveau. Su viaje se interrumpió cuando su hija, Marjatta, murió de difteria en marzo de 1895. La Flor de la Muerte es un conmemorativo para ella. Fue tallado en un disco de madera de pino, suave y de grano grueso, pero la impresión es sutil y delicada. El poema adjunto es del mismo artista: "Al borde de un estanque negro creció una hermosa flor pálida, en mi sueño la recogí, pero de ese sueño no despertaré, fue la flor pálida de la muerte ...".