Muerte De Inessa De Castro, Esposa Morganática Del Infante Portugués Don Pedro by Karl Bryullov - 1841 Museo Pushkin Muerte De Inessa De Castro, Esposa Morganática Del Infante Portugués Don Pedro by Karl Bryullov - 1841 Museo Pushkin

Muerte De Inessa De Castro, Esposa Morganática Del Infante Portugués Don Pedro

óleo sobre lienzo •
  • Karl Bryullov - 12 de DIciembre, 1799 - 11 de Junio, 1852 Karl Bryullov 1841

Si estás leyendo esta publicación justo poco después de ser publicada, es probable que el equipo de fútbol portugués aún esté a horas de jugar su partido de la semifinal de la Copa Mundial. Algunos de ustedes ya saben que soy portugués. Es posible que pocas personas estén de acuerdo cuando digo que tenemos el mejor equipo, y todos los que aceptan deben ser portugueses. El lugar de nuestro nacimiento es una cuestión de aleatoriedad absoluta, por lo que estar de acuerdo conmigo sería tan racional como tirar los dados; así es el nacionalismo irracional. Cuando ellos - políticos, xenófobos y nacionalistas- apelan a su sentido de patriotismo, lo que realmente están diciendo es: "Este particular lugar donde nací por casualidad es mejor que ese particular lugar donde naciste por casualidad". Cuán profunda es esta premisa que dejaré a tu criterio.

Ahora déjame contarte una historia de amor portuguesa antigua, verdadera y trágica. D.Pedro, un príncipe, estaba en un matrimonio real arreglado con D. Constança, pero pronto se enamoraría inmensamente de la más hermosa de sus sirvientas, Inês de Castro. No pasó mucho tiempo antes de que su amor fuera notado por la futura reina. Como venganza, D. Constança hizo a Inês la madrina de su primogénito, lo que impidió que Pedro saliera con Inês, ya que en ese tiempo se consideraba a una madrina esencialmente como una hermana, esto convirtió a incesto el amor de D. Pedro y de Inês. Sin embargo, una semana después del bautismo, el niño murió. Los rumores se extendieron sobre el sentido de la "mala" relación entre la madrina y el padre en duelo, mientras el amor entre ellos se hacía más y más fuerte. La futura reina falleció, y el viudo D. Pedro se fue a vivir con Inês.

El rey D. Afonso IV, estaba disgustado por la unión "antinatural" de un príncipe y una sirvienta, y organizó un plan para asesinarla; Inês fue apuñalada y murió cerca de una fuente. D. Pedro, con una pena furiosa, se rebeló contra su padre, destruyendo castillos y jurando venganza por el asesinato. Cuando él se convirtió en rey, ordenó que los corazones de aquellos que mataron a su amada fueran arrancados, y que el cadáver de Inés sea desenterrado y puesto en un trono. Su mano fue besada por la gente mientras la proclamaba su reina. Hoy están en compañía sepulcral, cara a cara en sus tumbas en el Mosteiro de Alcobaca, y se dice que, aquellos que visitan Quinta das Lágrimas, el jardín donde murió la reina póstuma, aún pueden ver su sangre salpicada en las rocas. Para mí, cualquiera que juzgue a los demás por el lugar de procedencia o por alguna circunstancia (cualquiera que sea) de su nacimiento, es un tirano, al igual que el rey D. Afonso IV.

Artur Deus Dionisio