Madame Moitessier

En este mismo día en 1870 nació Jean-Auguste-Dominique Ingres (quien es también uno de mis pintores favoritos <3). Ingres, aprendiz de (Jacques-Louis) David, promulgó la estética neoclásica de su maestro a lo largo de su larga y exitosa carrera. Ingres adoptó la supremacía de la línea sobre el color, el estudio de la escultura antigua y el valor del dibujo con el modelo real, principios que perfeccionó en su expresivo uso de la línea para definir la forma. Ingres fue realmente el mejor en un tipo de arte: el retrato. En una época en la que la fotografía se popularizó, con frecuencia se le reconoce como el último maestro del retrato, a pesar de que odiaba pintar retratos.

Madame Moitessier, la hija de un oficial del gobierno adinerado y esposa de un comerciante de encaje, aparece en tamaño de tres cuartos contra un fondo de damasco magenta. Viste un traje de noche de seda negra con un encaje blanco en la parte superior que se superpone con un chal de encaje negro. El traje negro y su piel compensan a las brillantes joyas. La superficie está pulcramente acabada y las pinceladas son casi invisibles.

Ingres ha simplificado los rasgos de Madame Moitessier para acercarla al ideal grecorromano. Su peinado y la aureola decorativa de rosas acentúan el hecho de que su cara es perfectamente oval y sus rasgos simétricos. El cuerpo de la modelo es prácticamente plano y, de esta forma, enfatiza que la relación entre la figura y el suelo es un juego de líneas y formas. Ingres, al explotar las posibilidades curvilíneas de la forma de la mujer, ha transformado a Madame Moitessier en una monumental visión del ideal de belleza.