Élisabeth Vigée Le Brun
En 1777, la emperatriz María Teresa de Austria escribió a su hija María Antonieta (sí, esa María Antonieta) pidiéndole un retrato. Un año después, la reina encontró por fin al artista capaz de pintar el retrato que tanto había esperado: Élisabeth Louise Vigée Le Brun, hija de Louis Vigée y esposa del famoso marchante de arte, Jean-Baptiste-Pierre Le Brun. Era exactamente contemporánea de la reina y las sesiones de retrato pronto se convirtieron en deliciosos momentos entre estas dos nuevas amigas. La artista pintó más de 30 retratos de María Antonieta y su familia, lo que llevó a la percepción común de que era su retratista oficial, algo bastante único en la época.
Vigée Le Brun recordaba que la reina "caminaba mejor que cualquier otra mujer de Francia, manteniendo la cabeza bien alta con una majestuosidad que la distinguí en medio de toda la corte".
Marzo es el Mes de la Historia de la Mujer y aprovechamos esta estupenda ocasión para presentar este retrato de una mujer muy importante, realizado por una artista muy importante. ¡Que lo disfrutes!
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