Mujer escribiendo una carta

Esta pintura ha sido robada dos veces en los últimos veinticinco años. Su propietario, un miembro del Parlamento británico, fue atacado por miembros armados del Ejército Republicano de Irlanda, que irrumpieron en su propiedad en 1974 y tomaron un total de diecinueve pinturas, junto con un Goya, dos de Gainsborough y tres de Rubens. La pintura fue recuperada una semana después. Luego, en 1986, los delincuentes de Dublín robaron la pintura y solo después de más de siete años de negociaciones secretas y el trabajo internacional de detectives se recuperó la pintura. El trabajo muestra a una mujer de clase media a la que asiste una sirvienta que presumiblemente actúa como mensajera y mediadora para la dama y su amante.