En la playa

En la playa es un brillante ejemplo de la rapidez del pincel de Manet y su don para inmortalizar el instante. Al observar el cálido color beige de la arena fina, uno se convierte en testigo del paso del tiempo, mientras que las olas en la orilla baja alcanzaban los límites. Este es Manet en su máxima expresión, con sus delicados tonos de gris, gris parisino y su hábil pincelada, que con unos pocos trazos sugiere la espuma de las olas que rompen en la playa. La ciudad francesa de Boulogne, que Manet visitó con su familia en 1864 y 1868, fue parte de una floreciente cultura turística desarrollada durante el Segundo Imperio (el reinado de Napoleón III en Francia desde 1852 hasta 1870). Las nuevas líneas de tren que unía París y la costa hacían que el mar fuera accesible tanto para las clases medias como para las ricas. Esto creó una sociedad alternativa con rituales y expectativas que, comprensiblemente, eran menos formales que las de la capital. En la playa de Manet, una vista de bañistas en la arena y en el agua, captura los placeres de la recreación de verano en la playa, disponible tanto para parisinos como para residentes locales.