Niños en un Jardín (La Enfermera)

Mary Cassatt se volvió más conocida por sus retratos de mujeres y niños en situaciones domésticas. Niños en un Jardín (La Enfermera) es el primer cuadro al aire libre Impresionista mayor, y es una de las primeras obras de arte. Ella lo incluyó en su octava Exhibición Impresionista en París en 1886 y en su primer exhibición como artista sola en Estados Unidos en 1895. La pintura muestra una enfermera tejiendo sentada en una banca en un jardín cubierto de flores. Uno de los niños duerme en la carriola a su lado; el otro juega a sus pies. Como muchos de los cuadros de Cassatt, esta escena ofrece un vistazo íntimo a las vidas privadas de los sujetos. Logra representar el encanto de niños y bebés sin el sentimentalismo de muchos otros cuadros de aquel tiempo. Algo inusual para Cassatt, por otro lado, es la aplicación suelta de pintura en el trabajo, su composición fuera de centro y su énfasis en el paisaje. La luz del sol radiante teje la composición; los colores brillantes se extienden por el lienzo. Las figuras expertamente articuladas muestran la disciplina al delinear y su habilidad para volverlas reales a través de la cuidadosa aplicación de la pintura. Tomen, por ejemplo, los detalles del bebé durmiente: La boca que se inclina un poco hacia abajo, junto con su mano posada contra su cara para su comodidad.