La siesta

¡He soñado con un sábado así!

Gustave Caillebotte no solo fue un gran pintor y apoyó a los impresionistas (como hombre rico los apoyaba financieramente); también era un dibujante altamente calificado y, con mayor frecuencia, usaba carboncillo y pasteles para sus dibujos, que se completaban con varios niveles de detalle, algunos eran bocetos de estudio y otros eran obras de arte independientes en toda regla. La perspectiva fue en general un elemento clave en sus obras. Esto siempre requeriría atención a los detalles o produciría riesgos de errores que incluso los ojos más aficionados podrían detectar. Aquí, la perspectiva es impecable.

Como podemos ver hoy, Cailebotte fue el Edward Hopper de su época no solo en sus famosos óleos, sino también en sus rápidos pasteles. Esta obra de arte es tan atemporal que en realidad no podemos decir si es 1877 o 1977 o un hombre en el parque el sábado pasado de 2023.