Lavinia Fontana
Este retrato ha vuelto a ser atribuido a Lavinia Fontana, pintora de retratos altamente demandada a finales del siglo XVI. Se formó como artista junto a Agostino Carracci en el estudio de su padre Prospero en Bolonia, al haberle sido vetado el acceso a la Academia debido al interés que mostraba por el dibujo de desnudos.
Retrato de una dama muestra la habilidad de Fontana con el pincel, su dominio reproduciendo encajes y joyas, y su innato entendimiento de la composición y la forma, gracias a su formación en escultura clásica. La representación de las manos, sin embargo, carece de detalles anatómicos bajo la piel. Durante este periodo, se solían incluir perritos en los retratos, simbolizando la fidelidad conyugal, virtud esencial de una buena esposa.
Lo que principalmente se pretendía con estos retratos no era solo conseguir un verdadero parecido, sino expresar los aspectos más honorables de la personalidad del sujeto. De acuerdo con la noble boloñesa Lucrezia Marinella, los hombres tenían diferentes formas de alcanzar el éxito y el honor, mientras que las mujeres se encontraban limitadas al engalanamiento y la vestimenta como indicadores de sus logros, quedando, paradójicamente, bajo el control de sus padres y maridos. Fontana supo captar con eficacia la imagen de sus modelos al representar meticulosamente estos elementos.
¡Lavinia Fontana aparece en nuestro conjunto de 50 postales de mujeres artistas!
P. D.: En los tiempos en que hacer carrera como artista no era algo que estuviera al alcance de la mayoría de las mujeres, Lavinia Fontana realmente consiguió un notable éxito. Conoce a la pintora de los papas, los desnudos y las damas de la nobleza.